BURDEOS
El día 26 de diciembre, después de haber pasado Nochebuena y Navidad en familia, salimos rumbo al Perigord. Eso sí, nosotros que estamos acostumbrados a viajar con lo imprescindible, esta vez salimos con la casa a cuestas: desde el reproductor de Cds hasta el portatil, incluyendo comida para un batallón!!
El objetivo del primer día era llegar a Burdeos sin prisas, instalarnos en el hotel Formula 1 en el que habíamos reservado un par de noches y hacer una primera toma de contacto con la ciudad.
Viajamos tranquilos, hicimos de camino un picnic en el coche a la hora de comer porque llovía y llegamos al hotel sin problemas gracias al GPS. Afortunadamente el chico del hotel hablaba un castellano perfecto y él nos recomendó acercar el coche hasta la plaza de Stalingrado y desde allí paseamos por el centro.
El objetivo del primer día era llegar a Burdeos sin prisas, instalarnos en el hotel Formula 1 en el que habíamos reservado un par de noches y hacer una primera toma de contacto con la ciudad.
Viajamos tranquilos, hicimos de camino un picnic en el coche a la hora de comer porque llovía y llegamos al hotel sin problemas gracias al GPS. Afortunadamente el chico del hotel hablaba un castellano perfecto y él nos recomendó acercar el coche hasta la plaza de Stalingrado y desde allí paseamos por el centro.
Esta es la primera visión que tuvimos de la ciudad. Precioso, no?
Callejeando llegamos a la Rue Santa Catherine, una de las calles peatonales comerciales más largas de Europa, al menos eso decía nuestra guía! Asi, paseando, llegamos hasta la Plaza de la Comedia, donde está el Gran Teatro y el Hotel Regina. Allí vimos un mercado navideño, con sus puestos de artesanía, y como no, con sus puestos para tomar el vino caliente. En el otro extremo de la misma calle se encuentra la Plaza de la Victoria y la Puerta de Aquitania. El paseo fue muy agradable pero todavía recordamos el frío tan tremendo que hacía.
Al día siguiente por la mañana cayó un chaparrón tremendo, por suerte, un rato después levantó el día y pudimos disfrutar hasta de momentos de sol como se aprecia en las fotos.
La catedral de San André.
Nuestro primer destino fue la catedral de San André, de ahí fuimos callejeando hasta la Plaza Gambetta para luego llegar hasta la explanada des Quinconces.
La Plaza del Teatro.
Al fondo la Explanda de Quinconces.
Al fondo la Explanda de Quinconces.
La mañana quedó tan bonita que decidimos aprovechar y dar un buen paseo por la orilla de este inmenso río, el Garona. Pudimos ver el mercado ecológico de los domingos y llegamos hasta un centro comercial. Nor sorprendió ver como mucha gente tomaba ostras con vino blanco de aperitivo ... o pensándolo mejor, en vez de aperitivo sería su almuerzo.
No lo habíamos comentado antes, pero practicamente la mitad de la ciudad de Burdeos fue declarada a mediados del 2007 Patrimonio Mundial de la Unesco. Para muestra un par de botones.
LA DUNA DE PYLA
Conocíamos la existencia de esta duna por el blog de algún otro viajero pero realmente resultó bastante más espectacular de lo que pensábamos. Situada a unos 8 kilómetros al sur de Arcachon tiene unos 3 kilómetros de largo y unos 100 metros de altura!!
A pesar de que la tarde estaba un poco desapacible subimos hasta la cima y disfrutamos de esta estupenda vista de la zona.
Como podeis ver el tiempo lluvioso no desanimó al montón de turistas que se acercó hasta allí.
Después de la visita a la duna nos acercamos a Arcachon. Vimos la pista de patinaje sobre hielo, que por cierto no falta en ningún pueblito de la zona, el mercado navideño y dimos una vuelta por la orilla del mar hasta llegar al puerto. En esta época los días son muy cortos, así que en cuanto empezó a oscurecer pusimos rumbo de vuelta a Burdeos.
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