DIA 2
BHULBHULE - GHERMU
5 horas - 500 metros de ascensión
Estábamos impacientes por empezar a andar porque aunque el día anterior caminamos un par de horas, lo hicimos por carretera. Así que el verdadero trekking realmente empezó aquí, en el pueblo de Bhulbhule, y más concretamente en este puente que nos llevó al otro lado del río donde había una parte importante de su población.
Estas son las calles de Bhulbhule. Como veis los suelos están cubiertos por grandes losas de piedra. Es algo que nos resultó curioso y que vimos practicamente en todos los pueblos y aldeas por los que pasamos.
Este primer día el camino discurría por la margen derecha del río Marsyangdi. Estamos a poca altura y el valle es bastante ancho. En esta zona sobre todo cultivan maiz.
Aproximadamente hora y media más tarde llegamos a Ngadi donde tomamos un te que nos sentó de maravilla. Hay que decir, que aunque es abril amanece muy temprano y para las diez de la mañana ya hace mucho calor.
Como era nuestro primer día todo nos llamaba la atención, pero en seguida nos acostumbramos a pasar todos los días por delante de muchos "Guest Houses" donde se sirven comidas a la carta de una calidad mas que aceptable.
Hay que tener en cuenta que la ruta alrededor de los Annapurnas no se trata de una ruta de montaña. En realidad se trata del único camino que une todas las poblaciones que están a lo largo del valle y como no hay carretera ... pues hay que andar. Por esto precisamente, porque los paisanos tienen que andar varios días para ir de un pueblo a otro, y por supuesto por el turismo, hay tanto servicio hotelero en esta ruta.
El paisaje cambia constantemente. A ratos vamos junto al río, pero en seguida pica hacia arriba y vamos bordeando terrazas donde cultivan patatas, cebollas, maiz y algo de arroz. Cruzamos varios puentes colgantes y pasamos por aldeas pequeñas pero con mucha actividad.
Al principio vamos cogiendo altura casi sin darnos cuenta, pero para llegar a Bahundanda (1270m) tenemos que subir un repecho bastante fuerte seguido de un tramo de escalones que nos hace sudar la gota gorda.
Las vistas en todas direcciones son estupendas.
Este es el valle que dejamos atrás. Las nubes parece que nos persiguen pero afortunadamente el día continua soleado y muy caluroso.
Resulta muy interesante pasar por estas aldeas porque siempre vemos mucha actividad. Esta señora está haciendo esteras de paja.
A ratos andamos por zonas muy rocosas y a ratos vamos por pequeños bosques de hoja caduca, y por un momento estos árboles nos recuerdan a los de nuestra tierra.
Tras cinco horas de caminata, llegamos a Ghermu y paramos a comer en el Hotel Rainbow. Aunque en un primer momento nos planteamos la posibilidad de ir hasta el pueblo siguiente, que está a unas dos horas, finalmente decidimos que para ser el primer día ya hemos culmplido y nos alojamos allí mismo.
Dedicamos el resto del día a descansar, a leer y a pasear por el pueblo. Aquí no hay nada que hacer pero descubrimos que sobre las cinco de la tarde todo el mundo sale a la calle, pasea y charla con los vecinos hasta que a eso de las 7 se hace de noche. Entonces, todo el mundo se retira y nosotros también, claro.